No existe el “yo” en un equipo
Apenas te mudas con tu pareja, todo cambia. Lo que pensabas que era excitante e intrigante sobre tu pareja se vuelve molesto y asqueroso. Pero, una vez que superas todo eso, te das cuenta de que tienen que construir un hogar juntos.
Y cuando es hora de cambiar el foco de luz, tratar de colocar uno nuevo se vuelve una cuestión de trabajo en equipo. Y aunque parezca que la idea más astuta sería usar una escalera, no todos tienen una. ¡Así que esto es lo mejor que hay!